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Al leer el tema de @PapásBlogueros pensé que no tendría muchos detalles que contarles pero me equivoqué. La lista es extensa y les cuento de todas las facetas de mi vida:
Tengo que tomarme una taza de café todas las mañanas sino me da tremendo dolor de cabeza.
No me gustan las mascotas dentro de mi hogar.
Si deseo comprarme algo caro no lo compro hasta que no tenga un cupón de descuento.
Cuando llego a mi casa tengo que quitarme el reloj y las prendas.
No tengo y nunca he usado una secadora de ropa.
No me gustan las habichuelas de pote por lo que las hiervo en casa.
Del tema de la limpieza no disfruto limpiar las ventanas.
Crié a mi nene sin bobo o chupete y leche materna hasta su primer año.
Amo los caballos y algún día quiero tener otro caballo.
Trabajo en nóminas cuando estudie Biología.
Me aburro con facilidad.
Tengo que cambiar la decoración con frecuencia ya que me canso de ver lo mismo todos los días.
Me da vergüenza pero tengo que admitir que soy un fracaso pintándome la uñas. Si algún día las tengo pintadas es que mi esposo o alguien me las pinto.
Ahora se pone interesante, confesiones mucho más personales:
En cuanto al chocolate no soy la más fan. Una vez me invitaron para una actividad de blogueros en un lugar que todo el menú era basado en chocolate. Sin que se enteren estaba loca que terminara la actividad ya el olor del chocolate me tenía mareada.
Mi casa es bien pequeña por unos cuantos pies no cualifica para ser una “tiny house”. La construí hace más de diez años en un pedacito de tierra que me regalo mi papá. Empleamos muchos materiales que reusamos, tuve que trabajar en la construcción, ligar cemento, enmasillar, pintar, ser asistente de los trabajadores debido a que no tenía mucho presupuesto. Todos los muebles son antiguos comprados de segundas manos. Los muebles los restauró mi abuelo que es ebanista y yo ayude a pintarlos bajo su rigurosa inspección.
Esto ya lo había comentado por si no lo sabían vivo en el campo y mis vecinos del frente son las vacas. Las vacas corren a comer el pasto cuando mi esposo recorta el patio. Que conste el patio no tiene grama así que le echa mucha yerba.
Tengo grandes problemas visuales, no veo por un ojo. El año pasado me limitaron la licencia de conducir para solo conducir en horas de día (no después de las 6:00 pm). Esto representaba un problema grave ya que mi trabajo requiere que conduzca por mucho tiempo y distancias largas. Para hacer el cuento corto, encontré un especialista que me puso unos lentes de contacto (lentillas) especiales y mientras las tenga puesta puedo ver por ese ojo. Gracias a Dios pude remover la limitación de la licencia de conducir.
Tengo mil cosas más que comentarles pero se supone que sea un post corto. Será en la próxima. Quiero conocerlos, cuéntenme algún detallito, secreto o miedo de ustedes.